Todos los martes el Rabino Uri Said dicta un curso de Musar (ética) incisivo, ideal para aquellos jóvenes que desean refinar sus cualidades.
El martes 24 de noviembre, la clase se centró en las enseñanzas del Rabino Shlomo Wolbe, acerca del Iéser Hará – el mal instinto.
Las personas tenemos instintos buenos y malos. Parte de nuestro trabajo es no dejarnos llevar por la fuerza que nos inclina a hacer malas acciones. Sin embargo, ese instinto malo, nos es necesario, ya que cuando se lo trabaja, potencia al buen instinto.
En el relato del Génesis, en todos los días de la Creación está escrito: “Y vio Di-s que era bueno”. ¿Por qué al concluir la Creación dice: “Y vio Di-s todo lo que había creado y he aquí que era muy bueno? ¿Qué fue lo que originó que de ‘bueno’, pasara a ser ‘muy bueno’? No fue otra cosa sino que este versículo fue dicho después de la creación de la persona.
Una explicación es que “bueno” se refiere al buen instinto del hombre y “muy bueno” a que el mal instinto potencia al bueno, cuando está supeditado a él. El mal instinto es parte nuestra. Debemos aprender a controlarlo y canalizarlo para bien.