El martes 4 de mayo, el Moré Abraham Dwek disertó para un grupo de mujeres como parte del ciclo de charlas “Historias que cambian vidas”.
Compartió el poema “Florecer” de Shimón Netanel Matalon, Jasid de Breslev que falleció en la tragedia de Merón.
En lugar de llenarnos de decepción
aceptemos todo con amor.
En lugar de ser rígidos
seamos más flexibles.
En lugar de refunfuñar
dejemos al intelecto gobernar.
En lugar de confrontar
agradezcamos más.
En lugar de quejarnos
filtremos lo malo.
En lugar de «ahogarnos en el agua»
digamos: «todo es del cielo».
En lugar de culpar al mundo entero
recordemos al más grande de todos.
En lugar de entrar en ebullición
respiremos hondo, estirémonos.
En lugar de enojarnos
practiquemos la fe.
En lugar de ver todo negro
elijamos ver la mitad llena.
En lugar de hundirnos en depresión
recordemos que todo desafío es una
invitación a florecer.
Di-s define nuestra situación
y nosotros definimos la actitud.
«En lugar de ser rígido hay que elegir ser flexible, hay que filtrar las quejas sobre lo malo. y en lugar de llenarnos de frustración es mejor recibir todo con amor”, explicó el Moré Abrumi Duek.
Como cada martes de “Historias que cambian vidas” el ciclo concluyó con una lectura que reza: “El lugar desde el que podemos reparar una situación no es la crítica, ni el reproche ni la queja. Hay un poder dentro de uno esperando salir. A veces la dificultad es el terreno fértil que nos permite superarnos”.